La cacería del león es una impactante obra del pintor barroco Rubens realizada entre los años 1614 y 1615. Esta expuesta en el National Gallery de Londres y se trata de un óleo sobre roble de unos 73 cm x 105 cm.

Lo impactante de esta obra no tiene que ver tanto con su dimensión, sino más bien con la fuerza y volatilidad de la escena. Una batalla voraz, repleta de agresividad y angustia plagan cada rincón de este cuadro. Figuras de hombres y animales que se entremezclan en esta pulsión entre la vida y la muerte, la paz y la guerra, el sufrimiento y la victoria. Todo indica que la cacería de león encabezada por estos cazadores a caballo salió mal. Un león enfurecido tras ver morir a su leona se arroja sobre el caballo y los cazadores sin piedad, dispuesto a buscar revancha lleno de furia. 

Lo que mes atrapa de esta obra es la mirada del caballo, su ojo negro en el centro mira al espectador con expresión terrorífica, angustiante. Parece transmitir un mensaje silencioso pero poderoso, como si estuviera diciendo: “esto no es mi guerra”.. El pobre animal se para en sus dos patas traseras, por detrás el león aferrado a su lomo sin piedad. De frente otro guerrero, que le dirige una lanza que en vez de impactar en el león impacta en él.  Un cazador muerto aparece debajo del caballo y toda la escena parece una mezcla de emociones, polvo, sangre, sudor y adrenalina. Todo en este cuadro alude a la violencia y el sinsentido de la caza. Una escena que se fue de control, el hombre indefenso ante la naturaleza y los animales que sufren las consecuencias. En este oleo prima la monocromía, los ocres y blancos inundan la escena y solo vestigio de rojo sangriento se deja entrever brotando del caballo. 

Rubens, cuyo nombre completo fue Pedro Pablo Rubens, fue uno de los pintores barrocos más importantes de su época y su obra se caracterizó justamente por todo aquello que en esta pintura se representa. El color, lo exuberancia, la energía, lo dinámico. Esta obra aquí representada es típica de Rubens, quizás en ella no exista su característica sensualidad, pero si todo lo que tiene que ver con el dramatismo y la expresividad. Esta obra es pura emoción, pura expresión y expansión. Todo en ella queda dicho, por los cazadores con sus caras de furia y abatimiento, por el caballo y su expresión de dolor y terror y el león con su actitud enajenada y furiosa.